Actualizado en 2025

Las mantas térmicas para piscinas son un accesorio muy útil para mantener o aumentar la temperatura del agua y reducir la evaporación. Al estar expuestas a agentes externos y en continuo contacto con el agua, es importante mantener las lonas térmicas en las mejores condiciones para prolongar su vida útil y asegurar un rendimiento óptimo. 

Cómo limpiar la manta térmica de la piscina: pautas

1. Retirar la manta

El primer paso para comenzar el proceso de limpieza es quitar la lona térmica de la piscina para facilitar las labores de saneamiento y desinfección.

2. Preparar los productos

Llena un balde con agua tibia y añade jabón neutro. Evita el uso de productos químicos que puedan resultar agresivos o abrasivos para la lona, ya que pueden provocar daños o el deterioro del material de fabricación de la manta térmica de piscinas.

3. Limpiar la manta térmica

Sumerge una esponja, un paño o un cepillo de cerdas blandas en el balde de agua y frota la manta térmica con suavidad y en movimientos circulares. Es posible que tengas que ejercer un poco más de presión en las zonas más sucias o en aquellas donde haya manchas específicas para conseguir eliminar la suciedad más resistente.

4. Aclarar la lona

Lava la manta térmica de piscina con el agua de una manguera para quitar cualquier residuo superficial que haya quedado impregnado en la lona (polvo, productos químicos de piscina…), así como los restos de jabón.

5. Secar el cobertor

Una vez que hayas terminado de limpiar y aclarar el cobertor de verano, deja secar la lona por completo, ya que guardar la manta térmica de piscina con restos de humedad puede llegar a afectar al estado de la lona y a la calidad del material de fabricación del cobertor. Para ello, la mejor opción es extender la manta térmica sobre una superficie plana en una zona soleada donde haya un poco de viento para que se seque completamente antes de guardarla durante los próximos meses.

6. Almacenamiento

Si tienes la intención de guardar la lona térmica de piscinas durante un tiempo prolongado, debes hacerlo en un lugar seco y sombreado para que ni la humedad ni la incidencia directa de los rayos del sol perjudiquen la calidad de la lona. La mejor forma de guardar un cobertor de verano es enrollarlo, ya que si doblas la lona puedes provocar deformidades y roturas. Te recomendamos cubrir la manta térmica con una funda de protección que impida el contacto de agentes externos con la lona para evitar su deterioro, manteniéndola así en óptimas condiciones.

Cómo limpiar la manta térmica de la piscina

La limpieza adecuada de una manta térmica de piscina es esencial para que cumpla con su funcionalidad, así como para ampliar su vida útil. Mantener tu lona térmica de piscina en óptimas condiciones te garantiza disfrutar de la piscina a una temperatura agradable no solo durante la temporada de baño, sino también las semanas previas y posteriores. Ante cualquier duda, recuerda seguir las recomendaciones del fabricante de tu cobertor térmico.

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