- Mantas térmicas
- 3358 Vistas
Actualizado en 2025

Las mantas térmicas para piscinas, también conocidas como cubiertas solares, cobertores de verano o cubiertas de burbuja, son productos con una larga vida útil que solo se deben utilizar durante la temporada de baño y están diseñados específicamente para calentar el agua de la piscina sin tener que utilizar ningún otro sistema de climatización, por lo que son la opción más económica. Al no ser necesario el uso de sistemas de calefacción, el consumo de energía se reduce en más de un 70%.
La evaporación producida por el calor del exterior no solo conlleva un mayor consumo de agua, sino que también supone el desperdicio de los productos químicos utilizados para la desinfección de la piscina. Las mantas térmicas son un elemento fundamental a la hora de disminuir esta evaporación en hasta un 95% y, por tanto, reduce el uso de productos químicos en hasta un 40%, por lo que contribuyen al ahorro económico en el mantenimiento de la piscina. Cuanto mayor sea el grosor de la lona térmica, mayor capacidad de aislamiento ofrece.
Una prolongada exposición a los rayos solares, así como las altas temperaturas, son algunas de las causas de la aparición y la proliferación de algas y otros microorganismos en el interior del vaso de la piscina. Sin embargo, la opacidad de los cobertores de verano evita este problema en gran medida. Al ser transparente, el modelo Cristal no tiene la capacidad de llevar a cabo esta funcionalidad.
Nuestras lonas térmicas se fabrican a medida y para adaptarse a la forma de la piscina con exactitud. Este diseño personalizado, que se extiende sobre la superficie del agua, garantiza la máxima eficacia de la lona a la hora de absorber y transferir el calor al agua. Así pues, los cobertores de verano también sirven para proteger la piscina, puesto que evitan la entrada de suciedad en el interior de la piscina al actuar como una barrera física respecto a agentes contaminantes externos, tales como vegetación, insectos, polvo u otros residuos.
Las mantas térmicas para piscinas ofrecen tres funciones térmicas respecto al agua de la piscina según el color de la lona: conservar, mantener o aumentar la temperatura.
Para incrementar la graduación térmica del agua en hasta 10ºC, la lona absorbe la energía térmica de los rayos del sol y, a través de las burbujas de aire situadas en la cara interna de la lona, el calor se transfiere al agua de la piscina. Esta funcionalidad se puede llevar a cabo con diversos cobertores de verano, como son aquellos con la lona azul o transparente. Por su parte, las lonas de color negro se encargan de retener el calor acumulado en el agua debido a la acción de los rayos solares a lo largo del día o generado por el sistema de climatización de la instalación. Por otro lado, la lona blanca sirve para conservar la temperatura original de la piscina al evitar que la temperatura del agua aumente, por lo que es perfecto para las piscinas ubicadas en zonas cálidas en las que las altas temperaturas son habituales.