Filtros para piscinas

El medio filtrante que hace de barrera determinará el tipo de filtro para piscina, existiendo cada vez más materiales que, por su grado de porosidad y propiedades, pueden ejercer esta función:   

• Filtros de arena: Son los más usados por sus prestaciones, durabilidad y mantenimiento, en relación a su precio.  
• Filtros de diatomeas: es el más efectivo, pero también el más costoso del mercado, pues las diatomeas son un tipo de algas fosilizadas capaces de retener partículas de mucho menor tamaño. 
• Filtros de cartucho: compuestos de fibras sintéticas como el poliéster o la celulosa, son menos efectivos, pero más económicos. 

A la hora de elegir el filtro más adecuado, hay que valorar: 

• El volumen de agua a depurar (el tamaño de tu piscina).
• La potencia de la bomba de filtración que usarás.
• La capacidad de filtrado: lo recomendable es que el filtro pueda limpiar toda el agua de la piscina en 6/8 horas. 
• También influye el uso que le des a la piscina, pues a mayor uso, mayor necesidad de filtración.  

Si bien la media estándar para una piscina particular está establecida entre 6 y 8 horas, calcular la capacidad de filtrado específica para tu piscina es muy sencillo:  

1. Determina el volumen de agua a filtrar: multiplica las medidas del vaso para obtener los m3 de agua de la piscina. Por ejemplo, para una piscina de 3 m. de ancho, 5 m.  de largo y una profundidad media de 1,5 m., el volumen total son 22,5 m3 de agua (3 x 5 x 1,5 = 22,5).
2. Caudal de la bomba de filtración: divide el volumen de la piscina entre el caudal. Siguiendo con el ejemplo, si la bomba tiene un caudal de 4 m³/h: 22,5 / 4 = 5,6 horas, será el tiempo de filtrado idóneo para tu piscina.