Bomba de filtración para piscinas

Las bombas de filtración para piscinas se suelen clasificar por el tipo de conexión eléctrica o por el mecanismo de funcionamiento. Así, según nuestro tipo de instalación eléctrica, elegiremos entre monofásicas o trifásicas. 

En cuanto al tipo de funcionamiento, se dividen en:  

• Bombas autoaspirantes:  diseñadas para separar el aire del agua mediante un cebado automático, creando un vacío y haciendo que la presión atmosférica empuje el agua hacia la línea de succión. Son las más usadas por su excelente relación efectividad/precio.  
• Bombas centrífugas: de funcionamiento similar a las autoaspirantes, pero el cebado se realiza de forma hidráulica, mediante un sistema de hélices que mueven el agua. Son más pequeñas y muy fáciles de instalar, además de la opción más económica.  
• Bombas de velocidad variable: las más modernas y caras, ya que cuentan con un motor que adapta su velocidad a las necesidades de cada piscina. Además, son más silenciosas, consumen menos y tienen una mayor capacidad de filtración.  

Al igual que con el filtro, calcular la potencia de la bomba es básico para evitar problemas de funcionamiento del equipo de filtración, a no ser que optes por un modelo de velocidad variable.  

La potencia va ligada al caudal y al tiempo de filtrado. Teniendo como referencia el estándar de 6 horas, divide el volumen de tu piscina entre el tiempo de filtrado para obtener el caudal de bomba adecuado.  

Ejemplo: para una piscina de 3 m. x 5 m. x 1,5 m., el volumen total son 22,5 m3 de agua (3 x 5 x 1,5 = 22,5).  22,5 / 6 = 4 m3/h será el caudal de bomba adecuado para tu piscina. 

Todos los fabricantes indican la potencia en función del caudal de cada modelo, por tanto, con el caudal ya podrás elegir la potencia adecuada.  

Un aspecto importante es controlar el consumo energético que supondrá una bomba y lo puedes calcular fácilmente multiplicando sus horas de funcionamiento diarias por los kW de consumo indicada por el fabricante. A continuación, multiplica esta cifra resultante por tu tarifa de luz por kW.  

Ejemplo: si tu tarifa es de 0.2678 € / kW, y cuentas con una bomba de 2 kW/h de potencia media de consumo, que se usa 5 horas al día, la cuenta quedaría de la siguiente forma: 

2 kW/h x 4 horas/día = 8 kW --> 8 kW x 0.2678 = 2,14€/diarios --> 2,14 x 30 días  

= 64,27 €/mensuales será el coste mensual derivado del consumo de tu bomba de filtración.